5 MALOS HÁBITOS DE BELLEZA
QUE DEBES ABANDONAR
1. Deja de usar cosméticos no aptos para pieles alérgicas
Muchos cosméticos contienen alérgenos e ingredientes irritantes. Una buena regla general es buscar productos que contengan 0% de fragancia, 0% de alcohol y 0% de ingredientes innecesarios. Otros ingredientes potencialmente irritantes o alergénicos que se deben evitar incluyen los AHA (alfahidroxiácidos), la urea y los aceites esenciales. Si eliges maquillaje para piel alérgica y humectantes y productos para el cuidado de la piel hipoalergénicos, seguramente harás lo correcto.
2a. No subestimes la limpieza
Si no limpias la piel al final del día, estás dejando alérgenos e irritantes como el polen y la contaminación en contacto con tu piel durante toda la noche. Estos pueden interferir con la función de la barrera de la piel1 y causar irritación.
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2b. ¡No limpies en exceso!
Quieres quitarte lo que el día dejó en tu piel, pero si también quitas los preciados lípidos de la superficie de la piel, la dejas vulnerable a las reacciones. Opta por limpiadores suaves como las aguas micelares [MICELLAR WATER ULTRA Sensitive Skin] que saben qué quitar y qué dejar. El jabón, incluso el hipoalergénico, es demasiado fuerte para la piel sensible con tendencia a alérgica.
3a. No olvides lavarte las manos antes de aplicar productos
Podrías transfirir alérgenos e irritantes de cualquier cosa que hayas tocado a tu piel (solo piensa por un momento cuántos productos domésticos agresivos hay). También recuerda que muchos alérgenos de los productos llegan al frasco o botella desde el medioambiente. Siempre opta por un tubo en lugar de un frasco. Si tienes piel de tipo alérgica sumamente reactiva, busca un empaque hermético que tenga una válvula unidireccional para evitar que los alérgenos entren en la fórmula una vez que se haya abierto.
3b. No olvides lavar tus brochas, esponjas y aplicadores de maquillaje.
Cada una de estas prácticas herramientas es un depósito de polvo y alérgenos. Lávalos con jabón hipoalergénico al menos una ves por semana.
4.Olvídate de las máscaras caseras
Aunque sea divertido, saquear tu alacena en la cocina y preparar tus propios tratamientos para la piel, una receta puede provocar reacciones si cuentas con una piel alérgica. ¿Los agresores más comunes?
El jugo de limón: Su pH ácido puede irritar la piel y generar reacciones.
El bicarbonato de sodio: su pH sumamente alcalino es completamente incompatible con la fisiología natural de la piel.
La canela es un irritante reconocido, como lo descubrió una videobloguera de belleza de la peor manera.
La avena: Aunque resulta calmante para algunas personas, contiene muchos alérgenos para quienes están predispuestos.
Leche: Cleopatra solía bañarse en ella, pero es también uno de los alérgenos alimenticios más comunes.
5. No erradiques el cuidado de la piel por completo
Algunas personas suelen optar por eliminar todo tipo de cuidado de la piel. Pero resulta una medida con poca visión de futuro. Los tipos de piel más sensibles o alérgicos necesitan cuidados adecuados para mantenerse bien. Una bruma de agua termal refrescante seguida de una fórmula bien tolerada creada específicamente para piel con tendencia a alergias es un buen comienzo.
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